Potsdam (Alemania), 7 de mayo (DPA). Hoy, se ha confirmado que la División Regional del Partido Alternativo para Alemania (AFD) en el Estado Federado de Brandeburgo, situado en la parte oriental del país, ha sido clasificada oficialmente como una organización de «ley extrema» por los servicios de inteligencia de la región. Esta designación se enmarca dentro de una creciente preocupación por las actividades de la AFD, que ha sido objeto de exámenes intensivos por parte de las autoridades debido a sus posiciones políticas y su posible ascenso como una fuerza extremista en el ámbito nacional.
La noticia fue comunicada por Katrin Lange, el Ministro de Asuntos Interiores de Brandeburgo, quien forma parte del partido socialdemócrata. Esta decisión implica que ahora la AFD posee un total de cuatro divisiones regionales catalogadas como organizaciones extremistas, ya que anteriormente se habían clasificado las divisiones en Turingia, Sajonia y Sajonia-Anhalt, todas ellas ubicadas también en el este de Alemania. La AFD ha estado en el centro del debate político en el país, con sus políticas a menudo polarizantes que generan reacciones tanto de apoyo como de oposición entre la población.
La clasificación, que ha sido anunciada en el contexto de la creciente vigilancia sobre actividades potencialmente extremistas, se suma a la reciente evaluación realizada por la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (BFV), que es oficialmente conocida como la Agencia Alemana de Inteligencia Interior. La BFV, la cual tiene como responsabilidad la defensa de los valores democráticos en Alemania, declaró la semana pasada la AFD a nivel nacional como una organización de «derecho derecho», indicando así su tendencia hacia posiciones políticas radicales que desafían los principios democráticos del país.
De acuerdo con las declaraciones de Lange, la clasificación emitida por la BFV data desde el 14 de abril, aunque, según el Ministro, ella solo fue notificada sobre esto el 5 de mayo, lo que significa que debió haber estado disponible para su uso mucho antes de esa fecha. Esta situación ha suscitado críticas sobre la efectividad y la rapidez de la comunicación entre los diferentes cuerpos de seguridad del estado, quienes tienen la responsabilidad de supervisar y actuar frente a amenazas a la seguridad interna.
Como consecuencia de la respuesta tardía en recibir la información clasificada, el Ministro del Interior ha decidido destituir al jefe del BFV en Firesburg, citando una falta de confianza. Este incidente pone de relieve las tensiones internas dentro de los organismos de seguridad y la presión que están enfrentando para abordar de manera más efectiva las preocupaciones sobre extremismo en el país.