
(Miami, Estados Unidos). Lionel Messi continúa experimentando un impacto considerable en su carrera mientras enfrenta desafíos inesperados después de que su equipo, Inter Miami, sufriera una enorme decepción en las semifinales de la Copa de Campeones de Concacaff el miércoles pasado. Este resultado marcó otra frustración para la organización que busca ávidamente conquistar títulos.
El prometedor equipo estadounidense sufrió una derrota de 3-1 en su propio estadio ante el club canadiense, que fue más dominante en el encuentro, lo que dejó a los aficionados desanimados y decepcionados. Al finalizar el partido, el equipo sufrió una dolorosa caída que lo dejó fuera de la final del prestigioso torneo de Concacaff.
Este revés es especialmente significativo a tan solo un mes y medio de la Copa del Mundo, elevando la presión sobre el Proyecto Miami lanzado por Messi y su equipo. A pesar de la adversidad, Messi guarda la esperanza de que su grupo, que incluye a sus eternos compañeros de batalla, Louis Safe, Sergio Busquets y Jordi Alba, pueda potenciar su rendimiento en la próxima temporada, incluso con un promedio de edad de 36 a 38 años.
El año pasado, Inter Miami tuvo una destacada fase regular en la Major League Soccer (MLS), pero su aventura en los playoffs se detuvo de manera abrupta. El primer intento de alzarse con el trofeo anhelado resultó en una desilusión, quedando lejos de sus aspiraciones iniciales.
Con una temporada más acumulando experiencia, la expectativa recae sobre los llamados Cuatro Fantásticos, quienes enfrentarán un calendario que se vislumbra aún más exigente, abarcando la MLS, la Liga de Campeones, la Copa y otros torneos internacionales.
Lionel Messi, después de la contundente derrota de su equipo en las semifinales de la Copa de Campeones de Concacaff contra el Vancouver Whitecaps FC el 30 de abril de 2025.
Pesado
El director técnico argentino, Javier Mascherano, que lidera el club, no pudo ofrecer una solución viable al joven talento del equipo, Diego Gómez, quien fue transferido a Brighton, Inglaterra. La carencia de un reemplazo adecuado está limitando las capacidades del equipo y la estructura de juego en torno a Messi, lo que ha facilitado que sus adversarios piensen en su táctica defensiva.
En su primer año en Estados Unidos, Messi ha logrado sumar ocho goles en 14 partidos en diversas competiciones. Sin embargo, la carga ofensiva que lleva en sus hombros es considerable. A pesar de que ha demostrado ser un líder en la cancha, la presión para obtener resultados es abrumadora.
A su lado, la colaboración de Uruguayan ha disminuido, y los jugadores, como Sergio Busquets y Jordi Alba, no están funcionando al máximo de su potencial, lo que afecta al equilibrio del equipo. Aunque Jordi Alba sigue siendo un jugador ofensivo y peligroso, sus responsabilidades defensivas se han visto comprometidas.
Previo al encuentro con Vancouver, el equipo de Miami logró beneficiarse con un rápido gol de Alba en los primeros minutos, lo que parecía revivir sus esperanzas. No obstante, el espíritu de lucha de los Whitecaps, el equipo revelación de esta temporada en la MLS, fue inquebrantable. Con un empuje notable, cambiaron las tornas, logrando mantener la presión sobre el Inter Miami.
Lionel Messi, del Inter Miami, dribbleando el balón frente al defensor canadiense Sam Adekagbe del Vancouver Whitecaps en un emocionante encuentro.
Copa Mundial de Clubes en el horizonte
Durante la conferencia de prensa, Mascherano expresó su desazón por la incapacidad de los jugadores para mantener la calma en un momento crucial del partido, donde tuvieron amplias oportunidades para igualar la serie.
“Hicimos lo que pudimos”, comentó. “Lo que no esperábamos era ser castigados en un abrir y cerrar de ojos con dos goles en la segunda mitad. Tuvimos que encontrar la manera de serenarnos”.
Inter Miami no aprovechó su ventaja y demostró tener dificultades para seguir el ritmo de un equipo dinámico como Vancouver. El análisis del entrenador rival, Jesper Sørensen, dejó claro que su conjunto tiene la juventud y energía necesarias para correr y jugar con intensidad.
Como resultado, Mascherano instó a sus jugadores a enfocarse en su participación en la MLS, donde actualmente se encuentran en una posición modesta en la tabla clasificatoria. Sin embargo, se avizora un desafío importante en el horizonte con la próxima Copa Mundial de Clubes, con un partido inaugural programado para el 14 de junio contra el Ahli de Egipto.
Otras competiciones internacionales y un grupo de equipos poderosos están en la mira, poniendo presión adicional sobre las actuaciones de Messi y su equipo en un momento crítico de la temporada.