Durante la cumbre de la Liga Árabe celebrada este sábado, los líderes árabes discutieron y acordaron varios puntos cruciales que tienen como objetivo alcanzar un alto al fuego en la Franja de Gaza. En medio de una intensificación del conflicto, se hizo un llamado urgente a la comunidad internacional para que se concentre en ayudar a «detener» el derramamiento de sangre en esta región devastada por la violencia.
Al finalizar la cumbre en Bagdad, los países miembros de la Liga Árabe emitieron una declaración conjunta que enfatiza la necesidad de que la comunidad internacional ejerza presión para poner fin al actual derramamiento de sangre. Este compromiso busca garantizar que la asistencia humanitaria urgente pueda acceder de manera efectiva a todas las áreas de Gaza. La situación humanitaria ha llegado a un nivel crítico, y es imperativo que la comunidad global actúe rápidamente para aliviar el sufrimiento de los civiles atrapados en el conflicto.
El documento emitido por los líderes árabes también subraya la importancia de financiar el plan de reconstrucción de la Franja de Gaza, el cual fue presentado previamente en una cumbre de líderes árabes organizada en marzo. Este ambicioso plan contempla la necesidad de reunir $53 mil millones en un periodo de cinco años para restaurar la infraestructura devastada y brindar apoyo a la población afectada. La Liga Árabe instó a los países donantes a «brindar rápidamente el apoyo financiero necesario» para llevar a cabo este proyecto que resulta crucial no solo para la recuperación de Gaza, sino también para la estabilidad de la región en general.
En el contexto de estas negociaciones, es notable que la propuesta de la Liga Árabe se ha presentado como una alternativa a un controvertido plan ofrecido anteriormente por Donald Trump, que implicaba poner a la Franja de Gaza bajo un control estadounidense. Esta situación ha intensificado las tensiones en la región, y la necesidad de alternativas viables es más urgente que nunca.
Israel no se detiene
Mientras tanto, el ejército israelí ha anunciado el inicio de una nueva operación que incluye «extensos bombardeos» en la Franja de Gaza. Esta operación tiene como objetivo debilitar al movimiento islámico palestino Hamas, buscando recuperar el control sobre áreas estratégicas de la región. Sin embargo, estos ataques han llevado, según reportes de la defensa civil de Gaza, a la muerte de más de 300 palestinos desde el miércoles pasado, lo que plantea serias preocupaciones sobre el impacto humanitario de las acciones militares.
Desde octubre de 2023, la campaña de represalia de Israel en Gaza ha dejado un saldo devastador, con más de 53,272 muertos, en su gran mayoría civiles, según los últimos datos proporcionados por el Ministerio de Salud de Hamas, datos que la ONU considera confiables. Esta cifra alarmante destaca la grave crisis humanitaria y la necesidad urgente de un alto al fuego efectivo que permita la entrada de ayuda humanitaria y brinde un alivio real a los afectados por el conflicto.
Con AFP