Ciencia y tecnología

Este Mercedes Clase G cuesta lo mismo que un Dacia Duster: el precio es el mayor inconveniente.

163,756.71 euros.

Este es el precio que lanza el configurador Mercedes G al ingresar para seleccionar todos los detalles de nuestro próximo gran desplazamiento eléctrico. Desde la elección del color exterior hasta las características interiores, el configurador nos permite personalizar cada aspecto de este vehículo, presentando una experiencia inigualable al cliente. Este precio inicial, sin embargo, es solo el comienzo de lo que podría convertirse en una inalcanzable suma total de costes.

Por supuesto, es el precio de partida. Si desea mejorar la experiencia en su Mercedes Clase G Electric, existen opciones adicionales. Por ejemplo, si el cliente quiere agregar el paquete de confort, que incluye sistemas innovadores como apertura de puertas sin llave y carga inalámbrica del teléfono móvil para los asientos delanteros, podrá encontrarse sumando otros 2,000 euros al total. Esto se suma rápidamente y transformando la suma, lo que lleva a la conclusión de que personalizar su Mercedes puede convertirse en una actividad costosa.

Con cuatro pequeños detalles, es sorprendentemente fácil superar la barrera de los 180,000 euros. Esto deja a muchos preguntándose si realmente vale la pena, y si existe algún modelo alternativo más asequible. Ya que se convierte en un precio inasequible para la mayoría de los mortales, desalineándose con lo que se podría considerar razonable. De hecho, es interesante ver cómo cualquier otro vehículo que se encuentre en el mercado no se compara con este emblemático SUV de la marca alemana.

Sí, uno por el cual se pagaron un poco más de 20,000 euros. Este es un modelo que, por supuesto, no es una clase eléctrica G, pero ha logrado imitar con excelentes detalles. Lástima que sea un coche de golf y no un verdadero coche de alta gama, ¿verdad? Este tipo de comparaciones sin duda provocan reflexiones sobre lo que la gente valora en un vehículo.

Un coche de golf de 24,000 dólares

Dado que esta Clase G de Mercedes se puede comprar al precio de un Dacia Duster, es probable que quien decida adquirir uno de estos modelos tenga el capital suficiente para comprar una auténtica Clase G de Mercedes. La información se trae a La unidad. Se asegura que un cliente haya pagado 24,000 dólares estadounidenses por este automóvil de golf, que se puede considerar como un «mini» Clase G de Mercedes, vendido por Subastas de Mecum, una casa de subastas famosa por su especialización en vehículos especiales y únicos.

En su sitio web, se explica que el supuesto SUV en cuestión es, de hecho, un quadriciclo (es decir, un coche de golf) que posee una batería de 10 kWh capaz de cubrir hasta 80 millas, equivalente a aproximadamente 120 kilómetros. Con una potencia de 20 kW (20 hp), el automóvil tiene una velocidad máxima limitada a 56 km/h. Esto significa que su capacidad para circular es bastante reducida y, aunque es una opción interesante para un uso cotidiano en áreas suburbanas, sigue siendo un quadriciclo poco más que un juguete en comparación con un SUV tradicional.

Los autos de golf se han puesto de moda en los Estados Unidos como pequeños vehículos para recados diarios. Al igual que aquellos fabricados por Citroën, como el Ami, o el Fiat Topolino, son vehículos que no están diseñados para las carreteras principales, pero son aceptados en caminos menores. A menudo, son utilizados por personas mayores que desean comodidad y no necesitan cubrir grandes distancias.

Esto ha promovido la aparición de modelos inusuales y creativos como esta versión de la Clase G en miniatura que actualiza el diseño de un vehículo alemán icónico. Dentro del coche, las diferencias son más notables; sin embargo, se pueden observar características como cuatro frenos de disco, una dirección compatible y una cámara de reversa que facilitan las maniobras en espacios reducidos.

Además, también cuenta con un entorno multimedia bastante completo en los asientos traseros, ofreciendo pantallas individuales para cada pasajero. En la parte delantera, hay unas pocas pantallas gemelas que están integradas en el mismo marco, aunque es claro que muchas de estas características están hechas de plásticos de menor calidad, preocupaciones que sus diseñadores probablemente no pasaron por alto al crear este Pseudo Mercedes.

Esta imitación da la impresión de que el mercado de los vehículos pequeños está dominado por modelos prácticos, pero también existe un nicho considerable para aquellos que buscan un accesorio con estilo. Esto se puede ver con el mimo que Fiat puso en el diseño de su Topolino, que se vende por 19,500 euros para el quadriciclo ligero (45 km/h) o 22,990 euros para el modelo de mayor potencia. Esta tendencia muestra que la estética y la funcionalidad pueden coexistir de manera sorprendente.

Foto | Subastas de mecum

En , se analiza sobre cómo el nuevo Fiat Topolino no es ni un Fiat tradicional ni un automóvil en el sentido convencional. Es algo mucho mejor: extremadamente práctico y adaptado a las necesidades modernas.