Luxemburgo/Berlín, 7 de abril. (DPA) . El ministro saliente de economía de Alemania, Robert Habeck, se expresó hoy de manera contundente sobre la política arancelaria implementada por el expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, calificándola como una «tontería». Además, Habeck enfatizó que el país norteamericano actualmente se encuentra en una «posición de debilidad» con respecto a las dinámicas comerciales.
El ministro alemán destacó que la idea de que un excedente o déficit comercial constituye un problema real es «incorrecta». Durante su llegada a una reunión de emergencia de los Ministros de la Unión Europea (UE) en Luxemburgo, Habeck argumentó que esta percepción errónea podría llevar a decisiones perjudiciales para la economía global.
El exministro subrayó que, en última instancia, el proceso de globalización beneficia a todas las economías involucradas. Afirmó que la economía estadounidense ha experimentado un crecimiento notablemente más acelerado en los últimos 20 años en comparación con la economía europea, y esto se debe, en gran parte, al actual sistema comercial internacional que promueve la cooperación en lugar de la confrontación entre naciones.
Habeck instó a sus colegas europeos a actuar de manera unificada y no tratar de obtener condiciones favorables de forma individual, lo que podría debilitar la posición de la UE en la escena global. Llamó a la necesidad de mantener un frente común, sobre todo en tiempos de incertidumbre comercial.
Además, el ministro advirtió sobre la tentación de reaccionar de manera impulsiva ante las políticas de Estados Unidos, afirmando que la UE carece del tiempo necesario para reaccionar adecuadamente a una nueva ronda de tarifas. «Son los estadounidenses quienes realmente sienten la presión y, en este momento, se encuentran en una posición de desventaja», sostuvo Habeck, añadiendo que esto se refleja en las recientes declaraciones de Elon Musk, amigo y asesor de Trump.
A partir de este miércoles, las exportaciones de la UE a Estados Unidos estarán sujetas a nuevas tarifas del 20%. Este cambio en las condiciones comerciales podría tener un gran impacto en las relaciones bilaterales y en la economía de ambos bloques.
Habeck expresó su esperanza de que se pueda evitar una escalada del conflicto comercial con la administración de Trump. Esta postura fue corroborada por un portavoz del gobierno alemán, quien reafirmó que Alemania no busca una guerra comercial. «Nuestro objetivo es continuar con la reducción de barreras comerciales», dijo el portavoz, Hebesterly, desde Berlín. «Además, debemos proteger a nuestras empresas nacionales de cualquier eventualidad negativa».
El portavoz también indicó que es fundamental no responder de forma emocional a estas provocaciones y que es esencial entender las implicaciones de las tarifas impuestas por Estados Unidos. Se mencionó que el destacado canciller Olaf Scholz está manteniendo conversaciones pertinentes con otros líderes europeos y con las principales compañías alemanas para abordar esta cuestión crítica.
Finalmente, se informó que Habeck y su equipo están en comunicación con los negociadores que están formación de una nueva coalición gubernamental en Alemania. Esto destaca la importancia de una relación cercana entre el gobierno actual y cualquier futuro gobierno federal que podría surgir, reiteró la portavoz.