
Llevamos años hablando de gafas inteligentes, pero el gran obstáculo es siempre el mismo: la pantalla sigue siendo demasiado grande para pasar desapercibida. En la Universidad de Würzburg asegura un grupo de físicos Ha creado el “píxel emisor de luz más pequeño del mundo”, un punto de luz que mide alrededor de 300 por 300 nanómetros e incluso con ese tamaño, según el equipo, alcanza el brillo de un píxel OLED tradicional de 5 por 5 micrómetros. Si la tecnología es escalable, se podría integrar una micropantalla completa de forma prácticamente invisible en la montura de las gafas.
El avance procede de Alemania, donde un equipo dirigido por los físicos Bert Hecht y Jens Pflaum ha conseguido reducir la tecnología OLED a un nivel sin precedentes. tu trabajo fue publicado en Science Advances el 22 de octubre de 2025. y describe un método para producir píxeles emisores de luz ultracompactos utilizando antenas ópticas. El objetivo no es sólo demostrar que funcionan, sino también sentar las bases para una nueva generación de módulos de proyección para gafas inteligentes y otros dispositivos portátiles.
Un píxel diminuto, un gran brillo. El descubrimiento es más que una cuestión de tamaño, radica en la intensidad de la luz que podría mantenerse miniaturizando la estructura. El resultado indica resoluciones muy altas en espacios prácticamente imperceptibles. En un dispositivo de este tipo, el panel no es visible desde el frente: actúa como una fuente de luz que proyecta la imagen sobre la lente, permitiendo integrar el sistema de proyección en zonas tan discretas como la montura de las gafas.
Alta resolución en un espacio reducido. Reducir una fuente de luz a dimensiones nanométricas sin pérdida de rendimiento no es sólo una cuestión de miniaturización, sino también de tecnología de materiales. El equipo ha demostrado que es posible conducir electricidad y optimizar las emisiones en una estructura donde el espacio deja poco margen de error. Con este control, la tecnología OLED entra en una nueva fase en la que los píxeles dejan de ser elementos discretos y se convierten en componentes ópticos con comportamiento de antena.
Para lograrlo, los investigadores tuvieron que rediseñar completamente la forma en que fluye la corriente dentro del píxel. En experimentos anteriores, la electricidad se concentraba en los bordes, dañando el material como un rayo buscando siempre el camino más corto. Su solución fue añadir una fina capa de aislamiento que bloquee estas fugas, dejando una pequeña abertura central por la que fluye la corriente de forma controlada. De esta forma consiguieron una emisión estable sin destruir el píxel con el tiempo.
Eficiencia y color. Aunque el prototipo tiene una sólida densidad operativa y estabilidad, su eficiencia cuántica externa es sólo del 1%. Los investigadores esperan mejorar este valor optimizando los materiales orgánicos y la arquitectura de la antena y planean ampliar el espectro de emisión a los tres colores primarios. Sólo entonces se podría considerar que esta tecnología está lista para la próxima generación de micropantallas portátiles.
Imágenes | con gemelos 2.5 | isis francia
En | Las gafas Xiaomi AI son mucho más que Ray-Ban Meta porque no son solo un producto. son una plataforma

