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Calurosa el viernes y la tarde siguiente

Este viernes, Costa Rica se verá afectada por las condiciones típicas al inicio de la temporada de lluvias. Esta situación coincide con un aumento de la temperatura durante la mañana, seguido de fuertes precipitaciones en las horas de la tarde. La información proviene del Instituto Meteorológico Nacional (IMN).

“Desde las primeras horas del día, se anticipa que habrá una cobertura nublada que se extenderá desde el mar hacia las costas del Caribe y del Pacífico Sur. Esta variable podría resultar en una ligera lluvia dispersa,” afirmó un portavoz del IMN.

En el transcurso de la mañana, el resto del país también se verá bastante nublado, aunque se espera que las temperaturas sean cálidas, creando una sensación de calor intensa en la mayoría de las regiones.

Observe más: Se prevé que la primera ola tropical arribará entre el lunes y el martes: las lluvias en las zonas del Pacífico y otras áreas de Costa Rica incrementarán.

Pronóstico de lluvia y tormentas

Durante la tarde, se estima que la región del valle central experimentará tormentas aisladas, al igual que diversas áreas del Pacífico. Estas condiciones serán propicias para la aparición de chubascos dispersos en las zonas montañosas correspondientes al Caribe y la Zona Norte.

Los meteorólogos han indicado que la actividad tronada podría ser más marcada en áreas cercanas a las montañas, implicando sectores específicos de la región:

  • Ola Nicoya
  • Valle Tempisque
  • Zona oeste y norte del valle central

“Se estima que la acumulación de lluvia rondará entre los 20 y 60 mm, con la posibilidad de que se registren cantidades más significativas en ciertas áreas”, añadió el IMN.

Recomendaciones de precaución

Ante estas condiciones climáticas, se hace un llamado a la población para que mantengan la precaución, particularmente en el Pacífico Sur y los terrenos del Pacífico central, que ya presentan niveles de saturación del suelo moderados a altos, oscilando entre un 80% y un 90%.

Adicionalmente, los niveles de saturación en el oeste del Valle Central y en la Península de Nicoya varían entre un 40% y un 70%.

“Estas circunstancias elevan el riesgo de inundaciones y deslizamientos de tierra, especialmente en zonas urbanas vulnerables, así como en áreas montañosas y en las costas del Golfo en el Pacífico Sur”, advirtieron las autoridades.

Entre los consejos resaltados se incluyen:

  • Atención a la saturación de aguas residuales en sitios propensos a este tipo de inundaciones.
  • Se recomienda estar alerta ante tormentas eléctricas y encontrar refugio seguro ante descargas eléctricas o condiciones climáticas adversas.
  • Se sugiere precaución ante la posibilidad de ramas, cables eléctricos u otros objetos voladores, ya que las ráfagas de viento pueden alcanzar hasta 80 km/h en casos aislados.