
Costa Rica está programada para recibir una disponibilidad de la Vacuna contra la fiebre amarilla a partir de finales de abril. Esta decisión es un paso crucial en el esfuerzo por controlar la propagación de esta enfermedad y garantizar que quienes necesitan la vacuna puedan obtenerla a tiempo.
La Cámara de salud costarricense ha comunicado que se han importado 34 mil dosis de la vacuna, lo que se espera facilite enfrentar el déficit que ha afectado al país en los últimos meses. Esta importación responde a un creciente número de solicitudes por parte de la población y es un alivio muy esperado para quienes requieren la vacuna antes de viajar.
El falta de vacunas ha impactado particularmente a aquellos que deben viajar a países que exigen un certificado
Massimo Manzi, director ejecutivo de la sala, explica que “como sector privado de salud, mantenemos una cuidadosa comunicación y coordinación con el Ministerio de Salud, con el propósito de lubricar procesos regulatorios esenciales para garantizar que, una vez que las vacunas lleguen al país, el se liberen las vacunas en el tiempo más corto posible”. Esto demuestra el compromiso del sector salud por facilitar el acceso a la vacunación.
Según las estimaciones basadas en datos históricos, el número de dosis importadas debería ser suficiente para cubrir la demanda durante varios meses. Esto se considera una solución temporal que permitirá estabilizar el suministro general de vacunas en el país mientras se implementan medidas a largo plazo para asegurar la disponibilidad continua.
Una vez que se completen los procedimientos sanitarios, se llevará a cabo una distribución inmediata de las vacunas a farmacias, hospitales y centros de salud privados autorizados, garantizando que estén a disposición de la población en el menor tiempo posible.
El precio de estas vacunas se ha establecido alrededor de ¢ 70,000 por unidad, un costo que el sector salud espera que la población pueda manejar, dado la importancia de la vaccination.
Nota Más: El Ministerio de Salud ha pospuesto por tercera vez la obligación de la vacunación contra la fiebre amarilla para viajar, lo que ha generado un alivio temporal a muchos individuos que planean viajar.
(Archivo/el observador).
Obligatorio
En marzo, por tercera vez, el Ministerio de Salud ha pospuesto la fecha en la que se vuelve obligatorio contar con la vacuna contra la fiebre amarilla para viajar a 53 países, incluidos Colombia, Brasil y Perú. Esta nueva fecha será a partir del 11 de mayo.
Las autoridades han explicado que el déficit en la vacunación se debe a una alta demanda en países que están lidiando con brotes de la enfermedad, evidenciando la situación crítica en muchas regiones.
Durante 2024, se ha registrado la peor epidemia de dengue en la historia reciente, lo que ha provocado que el vector mosquito presente un comportamiento epidemiológico cambiante. Este escenario ha incrementado la preocupación en torno a la salud pública.
Ahora, el mosquito Aedes aegypti está relacionado con el contagio y se han documentado casos en entornos urbanos, causando brotes en países como Brasil, lo que ha alarmado a las comunidades sanitarias.
‘Actualmente, hay una desviación de estas vacunas hacia América del Sur debido a los brotes y a la actual demanda del mercado«, declaró la ministra de salud, Mary Munive. Su llamado a la población es claro: ser conscientes de la situación actual. «Si usted tiene planeado viajar y no ha recibido la vacuna, le recomendamos que intente obtenerla en estos países donde está disponible», dijo.
La Cruz Roja ha estado realizando campañas de vacunación gratuitas, pero en la actualidad, la vacuna solo está disponible en el sector privado. (Cortesía de la Cruz Roja)
Sobre la fiebre amarilla
De acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la fiebre amarilla es una enfermedad viral aguda que puede transmitirse a los seres humanos a través de la picadura de un mosquito infectado. Es una enfermedad que puede ser letal y su control se ha convertido en una prioridad de salud pública.
Este virus es parte del grupo de los Flavivirus y es endémico en las regiones tropicales de América del Sur y África. Su propagación destaca la importancia de estar preparados ante posibles brotes.
Datos proporcionados por el Ministerio de Salud y la OPS muestran que se han confirmado en 2024 un total de 65 casos de fiebre amarilla en la región de las Américas, y en las primeras semanas de 2025, se han reportado 16 nuevos casos que incrementan la preocupación regional.
Las autoridades regionales están informando que los casos han comenzado a aparecer en áreas más urbanizadas, lo que complica la vigilancia y control de la enfermedad.
Síntomas:
- Fiebre alta
- Dolor de cabeza
- Ictericia (color amarillento en la piel y los ojos, que da origen a su nombre)
- Dolor muscular
- Náuseas
- Fatiga
En los casos más severos, la fiebre amarilla puede derivar en insuficiencia hepática, hemorragias internas y hasta la muerte, siendo estimado que el índice de mortalidad en casos graves es en un 50% de los pacientes afectados.