El Instituto de Electricidad de Costarico (ICE) ha emitido una advertencia contundente ante el creciente problema de ingresos ilegales de turistas a un área conocida como La Gata, que se sitúa en Venecia de San Carlos, popularmente denominada el Jurassic Canyon. Esta zona es notable por su belleza natural, pero también es famosa por los peligros que la rodean, especialmente en el contexto de seguridad para quienes se aventuran allí sin autorización.
La ubicación de Jurassic Canyon está cercana a la presa Toro I -Hydro -Electric y a la Casa de Máquinas Toro II. Los turistas frecuentemente ingresan al área a través del Parque Juan Castro Blanco y por la propiedad del hielo, como señala Javier Chacón, quien actúa como representante del complejo Toro-Cariblanco. Chacón ha subrayado que el acceso a estas áreas está completamente prohibido debido a los riesgos que implican.
“Esto es peligroso porque Upstream se encuentra el Bullwater 1 adecuadamente en el río Toro, que presenta una estructura diseñada para contener corrientes de agua, y pueden surgir diversas situaciones, incluyendo fenómenos naturales que pueden transformar esta zona en un cauce peligroso por donde fluye el agua hacia el río, poniendo así en riesgo a quienes se encuentren en la región,” afirma Chacón con preocupación.
Asimismo, se debe tener en cuenta que el aspecto geográfico de la zona es inadecuado para el acceso, dado que se asemeja a un cañón escarpado. María Fernanda Luna, portavoz del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), ha ampliado la información señalando que existe la posibilidad de inundaciones repentinas en este lugar, lo cual hace prácticamente imposible que alguien logre escapar a tiempo si se presenta una emergencia.
“Además, las rocas en el canal son de características muy cortantes, lo que aumenta aún más el peligro para quienes intenten navegar por esta área. La naturaleza de las rocas puede provocar lesiones severas,” indicó Luna, advirtiendo sobre los riesgos inherentes a esta situación.
3 muertes
De acuerdo a las recomendaciones de Luna, en el caso de que las personas sean detectadas en esta ubicación prohibida, deben abandonar el lugar de inmediato. Sin embargo, quienes sean reacios a cumplir con estas directivas pueden enfrentarse a la posibilidad de procesamiento legal por desobediencia a las autoridades competentes.
Cabe recordar que en el año 2019, se reportó la trágica muerte de tres mujeres que habían ingresado al sitio sin autorización. Esta información resuena con un eco sombrío para los que consideran aventurarse en el área. “En lo que va del año, hemos visto varias movilizaciones de rescate en las cercanías,” añadió Luna.
“Hacemos un llamado urgente a no ingresar a la zona conocida como Jurassic Canyon, que desagua el río Barroso hacia Quebrada. Los riesgos ya se han demostrado con la pérdida de vidas, y solicitamos a la población que trate este asunto con el respeto y la seriedad que merece,” declaró José Joaquín Granados, jefe de generación del hielo, enfatizando la gravedad de la situación.
Adicionalmente, se debe considerar el riesgo que representa la actividad en el volcán Poás, ya que puede desencadenar lahar en el río Toro y el río Gata, agrandando así el peligro de esta área. Por lo tanto, el Instituto ha instado a la población a evitar la compra de tours que son promovidos en redes sociales con el fin de acceder a este lugar, que es, sin lugar a dudas, un punto de atracción pero que entraña serios peligros.
Nota Más: SINAC reportó ingresos ilegales a áreas protegidas durante el fin y el comienzo del año 507