Una reciente investigación sobre los datos de víctimas fatales durante la Guerra de Gaza ha revelado que miles de nombres, muchos de los cuales corresponden a niños, han sido eliminados de los registros que fueron publicados por el grupo islámico Hamas. Este descubrimiento pone en tela de juicio la narrativa del grupo, que ha sostenido que una gran mayoría de las muertes registradas era de civiles, incluyendo mujeres y menores de edad.
Un giro inesperado
De acuerdo con un análisis realizado por Informes Honesto, una organización sin fines de lucro con sede en los Estados Unidos, Hamas tuvo un cambio significativo en su listado de muertes en una actualización que se realizó en marzo de 2025. El investigador Salo Aizenberg señala que se han visto más de 3.400 muertes «completamente identificadas» que se reportaron en versiones previas de los informes, incluyendo un alarmante 1.080 niños.
«Estas ‘muertes’ nunca ocurrieron. Las cifras han sido manipuladas», comentó Aizenberg en una entrevista con el medio británico El Telégrafo.
70% de civiles hasta el 72% de hombres en edad de combate
En los primeros meses de la guerra contra Israel, Hamas afirmó que el 70% de las víctimas eran mujeres y niños. Sin embargo, la nueva lista de muertes es radicalmente diferente a esta afirmación inicial: aproximadamente el 72% de las muertes corresponden a hombres entre 13 y 55 años, una franja etaria que generalmente se alinea con el perfil de los combatientes.
Este cambio en las estadísticas despierta un intenso debate sobre la posible manipulación de información en conflictos armados y plantea serias dudas sobre la utilización de los números como herramienta de propaganda.
Impacto internacional
Durante meses, la comunidad internacional ha dependido de las cifras proporcionadas por las autoridades de Gaza, especialmente Hamas, para evaluar la magnitud del conflicto y su impacto sobre los civiles. Estos datos han influido en la cobertura mediática, en las solicitudes internacionales hacia Israel y en las decisiones de organismos como la ONU.
La reciente revelación podría llevar a una reevaluación de cómo se informan y verifican las cifras de víctimas en regiones controladas por actores no estatales o grupos armados, lo que a su vez podría cambiar la dinámica de la respuesta internacional ante tales situaciones.
El conflicto y las narrativas
En conflictos contemporáneos, las cifras de fallecidos no solo representan la tragedia humana, sino que se convierten en herramientas de poder político y manipulación. El caso de Gaza resalta la necesidad urgente de contar con fuentes independientes y verificables para poder separar los hechos de la ficción en la narrativa de la guerra.
Mientras tanto, miles de vidas, sean combatientes o civiles, continúan siendo afectadas en un conflicto que no muestra signos de resolución en un futuro cercano.