

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha decidido absolver al exfutbolista brasileño Dani Alves.
Este fallo ocurre tras la revocación de la sentencia de febrero de 2024, cuando Alves fue condenado a cuatro años de prisión por un caso de violación ocurrido en un club nocturno en Barcelona en diciembre de 2022.
Durante la noche del incidente, se alegó que Alves llevó a una mujer de 23 años al baño de la sección VIP del club, donde se informó que intentó obligarla de manera violenta a mantener relaciones sexuales sin su consentimiento.
A pesar de la gravedad de las acusaciones, el Tribunal Superior argumentó, basándose en un comunicado emitido por AFP, que la decisión anterior contenía «vacíos, errores y discrepancias», lo que llevó a determinar que debía anular esa sentencia y absolver al exjugador de fútbol.
La justicia española señaló que las pruebas presentadas durante el juicio y la evidencia que sostenía la acusación no cumplían con «los estándares requeridos para desvirtuar la presunción de inocencia».
El TSJC también hizo hincapié en que había «deficiencias en la evaluación realizada por el tribunal inferior y las razones que lo llevaron a su decisión».
Un aspecto presentado en el proceso judicial fue que se alegaba que la víctima se había resistido a la agresión antes de que Alves supuestamente la golpeara, lo que constituyó un punto central en la defensa durante la sentencia inicial.
El tribunal destacó que el relato de la denunciante contenía contradicciones y que las pruebas forenses no respaldaban adecuadamente las alegaciones. La sentencia mencionó: «La descripción de la violencia y la forma en que se recogió el ADN en la boca de la denunciante no se alinean con el relato de los hechos que se presentó en el tribunal».
El equipo legal de Alves, liderado por su abogado Iness Gardiola, celebró la revocación de la condena. «Estamos muy contentos. La justicia ha prevalecido, y se ha demostrado que Alves es inocente», declaró a los medios tras conocer el veredicto del TSJC.
Además de la pena de prisión global, Alves había recibido una prohibición de acercamiento a la víctima durante cinco años y la obligación de indemnizarla con 150,000 euros (aproximadamente 163,000 dólares). Sin embargo, ahora que la sentencia ha sido anulada, estas sanciones han sido también revocadas.
Dani Alves había estado en prisión preventiva durante más de un año antes de que se le permitiera salir bajo fianza, establecida en un millón de euros (equivalente a 1.1 millones de dólares) en marzo de 2024.